INTRODUCCIÓN

México cuenta con muchos lagos y lagunas muy importantes desde hace mucho tiempo como Cuicuilco y Teotihuacán que florecieron en las orillas de los lagos y en los islotes,

Los lagos son cuerpos de agua dulce que no tienen comunicación directa con el mar y ocupan depresiones de terreno y las lagunas son cuerpos de agua contiguos al océano, muchas veces es agua marina que quedó aislada parcial o totalmente.

En México, los lagos son escasos, de poca extensión y, generalmente, su importancia es local. Sus aguas se aprovechan para la pesca, el riego agrícola o el turismo, como ocurre en los lagos de Cuitzeo, Pátzcuaro y Zirahuén, en Michoacán, y Yuriria, en Guanajuato. El lago más importante de la República Mexicana es el de Chapala: su superficie es de 1.149 km2 y de sus aguas -además de los usos agrícolas e industriales- depende Guadalajara, la capital de Jalisco.

Por su parte, las lagunas son cuerpos de agua salada o salobre, menos extensos y de menor profundidad que los lagos; generalmente se ubican en las costas y son un refugio para algunas especies animales. En ellas se pescan camarones, ostiones, almejas y langostinos. Entre las lagunas más productivas del país se encuentran Alvarado, Tamiahua y Mandinga en Veracruz; Términos en Campeche; Mar Muerto y Joya-Buenaventura en Oaxaca y Chiapas, así como los sistemas lagunares de Nayarit y Sinaloa.

Las aguas de los lagos y lagunas de México son de gran utlidad, se utilizan para riego, agua potable, generación de energía eléctrica y otros usos; sabemos que es importante saber los gastos que circulan por los ríos más importantes del territorio nacional. Asimismo, la disponibilidad del recurso también se encuentra relacionada con la calidad del mismo, para con ello asegurar que el agua sea adecuada para el uso al que se quiera destinar e ir planificando estrategias que puedan facilitarnos su uso sin agotar nuestro ecosistema acuático.